¿Es buen momento para comprar casa? Te proponemos 10 consejos para no fallar
Este año 2016 arranca con importantes mejoras en el mercado inmobiliario. El número de préstamos hipotecarios se ha incrementado, y al mismo tiempo, el índice de precios de vivienda, en el tercer trimestre de 2015, ha experimentado su mayor repunte desde 2007. Paralelamente, los bancos rebajan los requisitos para conceder crédito y hay buenas perspectivas de crecimiento.
Si actualmente te planteas comprar una propiedad, quizás no sea un mal momento. Sin embargo, como ocurre con anterioridad de la firma de cualquier contrato, para evitarse problemas, hay que andarse con pies de plomo. Comenzamos a enumerar los 10 consejos:
- Si estás convencido, no tardes demasiado
Si tienes las ideas claras, no te lo pienses mucho, el precio de la vivienda ha repuntado un 4,5% en el tercer trimestre de 2015, según el INE. Las previsiones indican que podría acabar 2015 con una tasa de crecimiento entorno al 2%, y que la tendencia de revalorizaciones continuará en 2016. También es cierto que el mercado no es homogéneo, y que los precios han subido sobre todo en las zonas céntricas de las grandes ciudades, mientras que en los barrios más periféricos y en las urbes más pequeñas siguen estables.
- Averigua si te conviene la inversión
A la vez que, es buen momento para adquirir una propiedad, es buen momento también para invertir: hay zonas con precios de venta todavía razonables, pero con alquileres interesantes. El consejo para un inversor agresivo es que, si compra por 100.000 €, debe poder alquilar por 500€; si compra en 150.000€ tendrá que alquilar en 700€.
- Déjate llevar
La elección de la vivienda depende de nuestras preferencias, necesidades y circunstancias personales: los gustos, la zona, los servicios, la cercanía al trabajo o a la familia, entre otros factores son los que influyen. Pero tampoco hay que volverse locos en la búsqueda, cuando se entra a una casa ya se sabe que es ella. La decisión se toma en unos pocos segundos.
- ¿Hipoteca a tipo fijo o variable? Calcula bien
En la actualidad, las hipotecas a tipo variable siguen siendo una opción apetecible. El Euribor a 12 meses, el tipo de interés al que están referenciadas muchas de las hipotecas españolas, sigue por los suelos: durante el mes de septiembre se ha situado en el 0,079%. Pero esta situación no se prolongará en eterno.
Por contraposición, están apareciendo ofertas muy interesantes a tipo fijo. Este producto está indicado sobre todo para los compradores que no quieran tener sustos con las fluctuaciones del Euríbor. Pero es muy importante echar cuentas ya que, puede ser que paguen algo más por los primeros años de su hipoteca.
Para ambos casos, calcula bien cuánto puedes pagar de dinero que se destina a la hipoteca nunca debería superar el 30%-40% de nuestros ingresos netos.
- Que el banco no te engañe
No se nos puede obligar, desde las entidades bancarias, a condicionar la concesión de la hipoteca a la contratación de seguros u otros productos. Lo que sí puede ocurrir, es llegar a un acuerdo, y ofrecer una hipoteca con un tipo de interés más bajo si aceptamos una mayor vinculación.
- Nuevo, usado y sobre plano
La elección, ¿vivienda nueva, vieja o sobre plano? Esta elección depende mucho de las preferencias de cada persona. Si bien es cierto que las viviendas nuevas suelen tener mejor calidad, también hay que considerar que, actualmente, la mayoría de las que quedan se concentran en zonas alejadas.
Las viviendas usadas suelen estar mejor ubicadas además de garantizar mayor rentabilidad.
Si se decide comprar sobre plano —una promoción que todavía esté por construir—, hay que tomar las debidas precauciones. El Colegio de Registradores, en su guía “Cómo comprar una vivienda en España, avisa que no debemos firmar contrato alguno, ni entregar cantidad alguna a cuenta del precio sin previamente comprobar una serie de elementos”. Entre ellos, que la promotora exista, que el solar esté inscrito a nombre de la misma y que el proyecto esté autorizado por el Ayuntamiento.
- Reserva la vivienda y negocia
Los términos reserva, señal y arras son sinónimos, recuerda AEGI en su Guía Breve -Información Sobre Vivienda-, e indican la fase previa al cierre del contrato de compraventa. Las arras confirmatorias, las más habituales, implican que el comprador entregue una cantidad a cuenta del precio final de la vivienda, y obliga a ambas partes a exigir, a partir del momento de la firma, el cumplimiento del contrato al precio acordado.
- Revisa las cargas
Antes de firmar la compraventa, puedes acudir al Registro de la Propiedad para obtener más detalles sobre la vivienda, por ejemplo, si tiene cargas pendientes y si están reflejadas en el contrato. En el registro también se puede obtener información acerca de las hipotecas de las que responda la vivienda; si está sometida a embargos o afectada por alguna situación litigiosa, o si existe un procedimiento en curso por irregularidad urbanística.
- Controla los gastos
Hay que comprobar que el vendedor no tenga pagos pendientes con la comunidad, si las eventuales obras realizadas por anteriores propietarios están a norma. También es recomendable informarse con antelación sobre los gastos de la comunidad y el importe del Impuesto de Bienes Inmuebles. Además, a partir del 1 de junio de 2013 hay que poner a disposición de los compradores de viviendas un Certificado de Eficiencia Energética. Este documento, obligatorio por normativa, debe ser entregado por el vendedor y representa una información importante acerca de los gastos en términos de energía que comporta la vivienda.
- Si no entiendes, pregunta
Nunca firmes nada que no entiendas. Tienes derecho a revisar el contrato de compraventa y, sobre todo, el de préstamo hipotecario, unos días antes de firmar. Y recuerda que, entre las funciones del notario, está la de asesorarte y aclarar las eventuales dudas que tengas al respecto.
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