¿En qué se diferencian el parquet y la tarima flotante? ¿Cuál debo escoger?
Seguramente uno de los propósitos que te has marcado para el nuevo año tenga que ver con el aspecto de tu hogar. Es normal, estás cansado de su diseño actual y quieres aprovechar para darle un estilo diferente este 2019. Uno de los elementos que puede cambiar por completo la estética de una casa es el suelo, aunque suele ser uno de los aspectos menos valorados. Si no sabes qué opción elegir, en HOOMES te enseñamos las diferencias entre dos de las mejores alternativas que tienes a tu disposición: el parquet y la tarima flotante.
Estos dos tipos de suelo tienen pequeñas diferencias entre sí, y no muchas personas se dan cuenta de ellas. Los grandes avances tecnológicos de los últimos años han permitido que el parquet y la tarima flotante se asemejen muchísimo, aunque como verás a continuación cada una de ellos tiene unas particularidades y ventajas muy diferentes.
Parquet, calidad, naturalidad y estilo
El parquet es sin duda uno de los mejores revestimientos de suelo que tienes a tu alcance. Es también uno de los más utilizados a lo largo de la historia, debido a la calidez y naturalidad que aporta. Son suelos compuestos íntegramente por madera, con un espesor aproximado de 10 milímetros, por lo que es un material muy ecológico y respetuoso con el medioambiente. Se instala directamente sobre la superficie del hogar mediante adhesivos.
Sofisticación y elegancia son dos de las características que se pueden transmitir mediante este revestimiento. No obstante, también es muy delicado, por lo que puede abollarse o rayarse al menor golpe. Para su limpieza tendremos que utilizar productos específicos que no lo dañen.
Tarima, mayor resistencia a mejor precio
Otra opción más económica para el suelo de nuestro hogar es la tarima flotante. Su principal diferencia respecto al parquet es su manera de adherirse al suelo, mediante listones de madera fijados al forjado de la casa. Se encajan unos a otros, sin que sea necesario utilizar adhesivos o clavos, creando un vacío que le da el nombre al suelo.
Es una opción mucho más económica que el parquet y también más fácil de instalar, no obstante el aspecto estético no es tan reseñable. Además, se trata de un material muy resistente, por lo que puede colocarse en cualquier zona de paso del hogar, que tiene un mantenimiento muy sencillo.
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